Luisa Fernanda

Federico Moreno Torroba

15, 18, 22 diciembre 2014 • 9, 12 enero 2015 - Las funciones comienzan a las 20.00 h. Domingos y festivos, a las 19.00 h
Sala Principal
Comedia lírica en tres actos
Libreto de Federico Romero y Guillermo Fernández Shaw
Música de Federico Moreno Torroba

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Dirección musical
Jordi Bernàcer

Dirección de escena y espacio escénico
Emilio Sagi

Vestuario
Pepa Ojanguren

Iluminación
Eduardo Bravo

Producción
Teatro Real de Madrid


Ballet de la Generalitat

Inmaculada Gil-Lázaro, directora

Cor de la Generalitat Valenciana
Francesc Perales
, director

Orquestra de la Comunitat Valenciana

Luisa Fernanda
Davinia Rodríguez

Vidal Hernando
Plácido Domingo

Carolina Isabel Rey
Javier Celso Albelo (15, 18, 22)
José Bros (9, 12)

Mariana
María José Suárez

Aníbal / vareador
Vicenç Esteve

Rosita
Sandra Ferrández

Don Florito
Juansa Lloret

Don Luis Nogales
Miguel Sola

Bizco Porras
David Rubiera

El Saboyano
Emilio Sánchez

Don Lucas
David Fruci *

Capitán
Germán Olvera *

Vendedora de cocos
Carmen Avivar **

Vendedor de abanicos
José Enrique Requena **

Un hombre
Bonifaci Carrillo **

Pollo primero
Lluís Martínez **

Pollo segundo
Antonio Gómez **

Una niña
Pau Castells

* Centre de Perfeccionament Plácido Domingo
** Cor de la Generalitat Valenciana

Sinopsis

ACTO I. Madrid, últimos días del reinado de Isabel II. Plaza de San Javier. La posadera Mariana conversa con la costurera Rosita. En esa misma plaza vive el funcionario jubilado Don Florito con su hija Luisa Fernanda, quien está enamorada del militar Javier Moreno. Éste, tras continuadas ausencias, acude por fin a visitarla justo cuando ella está en misa. Mientras Javier espera en la plaza, el revolucionario Luis Nogales y su amigo Aníbal intentan convencerlo para que se una a la causa republicana. Al advertir que la duquesa Carolina, camarera de la reina, les escucha, se meten en la posada. Entre tanto llega Luisa Fernanda, visiblemente triste al no ver a Javier. Mariana la consuela aconsejándole que se olvide de él y preste atención al rico hacendado extremeño Vidal Hernando que se hospeda en su posada. Luisa coquetea con él unos momentos, pero al final le da calabazas tras confesarle que está enamorada de Javier. Cuando Aníbal comunica victorioso a su colega Vidal que Javier apoyará la revolución, Vidal, furioso, se declara monárquico con tal de llevar la contraria a su rival. De camino a casa de Luisa, Javier es seducido por Carolina, ante la mirada incrédula de Aníbal y Vidal, quienes intuyen que Javier se hará monárquico tras caer en los brazos de la duquesa. Luisa Fernanda se desmaya conmocionada por la traición. Pese a ser monárquica como su padre, decide unirse, por despecho, a los revolucionarios.

ACTO II. Alrededores de la Iglesia de San Antonio. Carolina intenta que Vidal se pase al bando monárquico. Pero es en vano. Él permanecerá junto a los republicanos con tal de proteger a Luisa. Por otra parte, Mariana y Rosita no han tenido éxito en la recogida de limosnas para el santo, por lo que Carolina propone subastar el baile. Vidal supera a todos los hombres en la puja para bailar con Carolina, incluso a Javier, a quien regala el baile como gesto de desprecio. Él acepta tras arrojar su guante en señal de reto.
Días más tarde, en las calles de Madrid comienzan los primeros enfrentamientos entre monárquicos y republicanos. En una primera lucha Vidal derriba el caballo de Javier y éste queda a merced de los revolucionarios, aunque finalmente es salvado por Luisa. Más tarde, los monárquicos contraatacan y, tras liberar a Javier, sofocan la rebelión, que concluye con el arresto de Nogales como principal instigador. Javier y Carolina se abrazan victoriosos. Luisa promete casarse con Vidal.

ACTO III. Dehesa extremeña de Vidal. Después de muchos contratiempos, la revolución ha triunfado. Carolina ha sido desterrada a Portugal y Javier está desparecido tras la caída del trono de Isabel II. Mariana, Luisa y Don Florito preparan los festejos de la boda en la finca de Vidal. Llega Aníbal de Portugal, que trae consigo a Javier. Éste, desesperado, pide ver a Luisa. Cuando están a solas los dos, Luisa confiesa que, aunque aún le ama, ha decidido ser fiel al extremeño. Vidal, consciente de que nunca logrará que el corazón de Luisa le pertenezca, la insta a que se marche para siempre con Javier.